En las
inmediaciones de la cumbre ya hay cada vez menos nieve, pues el viento impide
que se acumule en ella, por lo que el último tramo lo realizamos sin crampones,
y con poca nieve.
Como siempre
cuando uno llega a las inmediaciones de la cumbre, se acumulan un torbellino de
sensaciones: cansancio, emociones, satisfacción del objetivo alcanzado,
alegría, pena, recuerdos de otras ascensiones, de otros compañeros, bueno todos esos pensamientos y sensaciones, pero todas de golpe.
Por fin a las
10:00 horas, el Toubkal decidió ser amable con nosotros, dejándonos pisar su
cumbre a todo el grupo.
|
Todo el grupo saboreando el momento.
|
Una vez en la
cumbre hubo de todo, abrazos, lágrimas, más abrazos, y sobretodo muchas fotos.
A la vez que nosotros empiezan a llegar otras caravanas de alpinistas: noruegos, los murcianos y los de Elx, vamos, un continuo goteo de nacionalidades: alemanes, ingleses, e incluso una chica filipina que iba sola, y que la parte final de la ascensión y todo el descenso la hizo con
nosotros.
|
Con mi cuñado Juan y con Kike, y su inseparable bandera de Pedrezuela
|
Permanecimos un
buen rato en la cumbre, en donde entre abrazos y emociones comimos un poco para recuperar fuerzas.
A las 10:40
horas iniciamos el descenso. Al llegar al amplio plató, no volvimos a poner los
crampones y reanudamos el descenso de un tirón hasta el refugio, al que
llegamos a las 13:00 horas.
Ni que decir
tiene, que lo primero que nos encontramos al llegar al refugio, fue con el
preceptivo té de bienvenida, y la comida preparada. Eso sí que es lujo.
|
Todo el grupo ya en el refugio.
|
Mientras
estábamos a lo nuestro. Entra en la sala un hombre de aspecto mayor, bajito. Es
un guía bereber, que lleva conduciendo gente al Toubkal durante 40 años, desde
1977.
En la gente que le rodeaba, se apreciaba un gran respeto hacia él. Los encargados del refugio, y otros guías se levantaban a
saludarle y estrecharle la mano.
Esta escena ya la había vivido en una ascensión en los
Alpes suizos, cuando Toni Cañizares y yo, en agosto de 1990, llegamos a la cumbre
del Allalin Horn de
4.027 m.s.n.m., por su arista nordeste. En la cumbre nos
encontramos a un hombre mayor, equipado con material muy clásico, y al que todo
guía que llegaba a la cumbre con sus clientes, lo saludaba con el mismo respeto
y admiración que al guía marroquí.
|
Años de oficio de guía. |
Por hoy solo
queda esperar a la cena, que nos la servirán sobre las 19:30 horas, y luego,
descansar, pues mañana nos queda el día más duro de todo el trekking.
27/04/2017
RFG. TOUBKAL – PICO TIMEZGUIDA – RFG. TOUBKAL – AREMD
|
Itinerario del quinto día |
Como hoy es día
de cumbre, pues toca madrugón a las 05:00 horas. Jesús decide no subir con
nosotros, y quedarse en el refugio hasta que volvamos.
A las 06:00 horas
salimos con los frontales, y en la misma puerta del refugio nos ponemos los
crampones.
Del refugio
salimos hacia el sur para remontar el valle por donde discurre el río Assif n´Isougouane, que en este tramo ya
discurre por debajo de la nieve, en dirección al collado Tizi n´Ouagane de 3.760
m.s.n.m.
Yo voy fatal,
desfondado e incapaz de coger el ritmo. Ayer me cansé en exceso intentando
coger un buen ritmo, y hoy lo estoy pagando.
Al llegar al collado nos quitamos
los crampones y comemos algo. Yo me tomo un gel a ver si me hace efecto y unos
frutos secos.
|
Collado Tizi n´Ouagane de 3.760 m.s.n.m. |
|
Mi cuñado Juan reflejado en mis gafas.
|
Seguimos ahora
por una arista, que es el tramo más técnico de la ascensión. Cada vez me
encuentro peor, y comento que yo me voy a quedar, que no puedo más.
Juan, Kike
y el resto del grupo me animan. Kike toma el mando, y se pone delante para marcarme el paso,
y Juan se pone detrás de mí. Esto de tener dos cuñados, aunque uno sea postizo, además de útil, es un lujo.
Poco a poco y paso a paso, finalmente
llegamos a la cumbre del Timezguida
de 4.089 m.s.n.m. son las 10:45 horas.
|
Finalmente consigo coger el ritmo.
|
La cumbre del Timezguida es inmensamente
grande, vamos, que cabe un pueblo. Su nombre significa “mezquita”, y junto al Ras
de 4.082 m.s.n.m. cuyo nombre significa “cabeza”,
pertenecen al macizo Adrar Ouanoukrim,
que en tamazigt significa “lugar alto y
siempre frio”
Nos hacemos las fotos de rigor, y debido al fuerte viento que
soplaba, nos bajamos enseguida.
|
Con Virgilio Beltrán, y Omar, nuestro guía.
|
|
Una de cuñados. Juan y Kike.
|
Kike habló con el guía comentándole que se
decidía no continuar al pico Ras y que bajaremos directamente al refugio, pues
si tenemos que seguir luego hasta Aremd, la jornada va a ser muy larga.
Iniciamos el
descenso, y en el collado nos volvemos a poner los crampones, y ya más
relajados empezamos a dejarnos caer por la pendiente.
Conforme vamos bajando me voy encontrando mejor, lo que
significa que yo estos días no había aclimatado como toca.
|
Llegando al refugio. Al fondo el collado Tizi n´Ouagane de 3.760 m.s.n.m. |
Como estaba previsto, a
las 13:00 horas llegamos al refugio, yo muy cansados.
Comimos, y las 14:00
horas empezamos a recoger nuestras cosas y montar los petates para cargar las
mulas y comenzar el descenso de 1.100 metros de desnivel hasta Aremd.
|
Todo el grupo dispuesto a descender hasta Aremd, con tres de la cuatro mulas, pues una de ellas decidió descender por su cuenta sin esperar a nadie.
|
A las 15:00
horas iniciamos la marcha, ya cada uno a su aire, yo conforme bajaba me iba
encontrando aun mejor, cansado, pero mejor.
El primer tramo
del descenso discurre a más o menos altura, pero paralelo al rio Assif
n´Isougouane en sentido N. y a veces NE. y por su orilla izquierda. Este camino
es un continuo discurrir de mulas, montañeros, turistas, con sus guías, o solos. En resumen, un sin parar de gente.
Por el camino
encontramos improvisados puestos de bebidas, comida y suovenirs, que aprovechan
cualquier pequeña corriente de agua para poner a enfriar las bebidas.
Seguimos
descendiendo, hasta que llegamos a divisar por debajo de nosotros en la orilla
del río la población de Sidi Chamharouch situada a 2.350 m.s.n.m., y a ambas partes del río.
Aquí ya tras descender hasta el pueblo, atravesamos el
río y nos situamos en la orilla derecha del mismo, ahora el río se denomina Mizane.
Morabito Sidi Chamharouch, es una aldea
que cuenta con numerosos cafés, tiendas, y alojamientos.
La palabra Morabito se
refiere a alguien al que se le considera como una persona pía, y a la que se le
atribuye cierta santidad.
En esta aldea de Sidi Chamharouch, destaca una gran
piedra pintada de blanco, y que señala la ubicación de la gruta en la que
pernoctó Sidi Chamharouch en donde hay una fuente sagrada.
El lugar es
frecuentado por peregrinos que vienen a rendirle culto y ofrendas, ya que se le
atribuyen propiedades curativas a trastornos mentales, y a problemas de
fertilidad femenina.
En la cultura islámica y en zonas tan rurales, la
infertilidad se le achaca siempre a la mujer, y no hace tantos años, en España también.
Continuamos el
camino. El valle se va abriendo cada vez más, en sentido NE, y luego N. hasta
convertirse en una amplia rambla en cuya orilla derecha, y en alto, se
encuentra Aremd final de nuestra etapa.
Nuestro
Gîte d´etape se encuentra en la parte más alta del pueblo. Como siempre que nos
acercamos a una aldea, la chavalería se nos acerca a pedirnos cosas.
Poco a
poco y ya muy cansados vamos tomando altura y por fin llegamos a nuestro
alojamiento.
Esta casa es la
más lujosa en la que hemos estado. Amplias habitaciones y varios baños con duchas
de agua caliente, por lo que esto ha sido un verdadero regalo como colofón del
etapón que hemos hecho hoy: del refugio al Timezguida casi 1.000 metros de
desnivel, y del Timengida hasta Aremd, 2.000 metros de descenso y un total de
12 horas desde que salimos del refugio a las 6 de la mañana, hasta las 18:40
horas, hora a la que hemos llegado a nuestro alojamiento.
Armed es un
pequeño pueblo bereber que se encuentra en el valle de Aït
Mizane a 1.945 m.s.n.m. y a unos 40 minutos de Imlil. Con cerca de 2.000
habitantes es el pueblo más alto del valle de Aït Mizane, en la confluencia del
rio Mizane y el Assif n´Imserdane.
Cenamos a las
20:30 horas, y tras la cena hacemos el protocolario reparto de propinas a cada
miembro del equipo, y por riguroso orden de escalafón se les entrega su
correspondiente sobre: al guía, al cocinero y a los muleros. Todos muy contentos.
Entre
nosotros aun cabían dudas de si les habíamos dado lo apropiado. Al día
siguiente salimos de dudas, pues mi cuñado Juan, cuando bajo a desayunar, uno de los
muleros le dio un abrazo contundente, esa era la señal de que nos habíamos
portado correctamente, cumpliendo las expectativas que se habían generado.
28/04/2017
AREMD – IMLIL – MARRAKECH
Hoy día
relajado, nos hemos levantado cada uno a la hora que ha querido. A las 09:20
hemos desayunado en la terraza, mientras conversamos con Omar, nuestro guía,
sobre la cultura islámica. El es creyente, y todos los días muy discretamente
saca un rato para aislarse del grupo y realizar sus oraciones.
La verdad es
que en todos estos días hemos podido disfruta de un tiempo estupendo, el de hoy
es especialmente espectacular.
Al encontrarnos tan ceca de Imlil, no disponer
de un horario estricto, nos lo vamos tomando con calma. Vamos recogiendo
nuestro equipo, y nuestra ropa, y poco a poco, a eso de las 11:20 horas,
partimos tranquilamente hacia Imlil.
El camino desciende poco a poco al fondo
del valle. Al principio el terreno es muy árido, pero según perdemos altura y
nos sumergimos en el fondo del valle, la humedad da paso a la frondosidad de su
vegetación, huertas, nogales, cerezos.
|
Entrando en Imlil |
Atravesamos las
aldeas de Tagadirt, y Targa Imoula, y enseguida entramos en
Imlil, a la que a veces denominan el Chamonix de Marruecos.
Situada a orillas
del rio Mizane a unos 1.800 m.s.n.m. es una población cuya economía era
eminentemente agrícola, famosa por la producción de nueces, manzanas y cerezas.
El paulatino aumento del turismo a lo largo del siglo XX, reoriento su
principal actividad hacia este sector.
En Imlil
encuentras hospedaje, guías, tiendas de comida, mulas, muleros, tiendas donde
comprar algo de material de montaña, o alquilarlo. (Muy básico)
|
Tiendas de artículos de montaña y demás utensilios varios.
|
En cuanto
entras a la población, te abordan los vendedores de bisutería, y demás
productos típicos de la zona.
Al final del
pueblo, en un prado que hay a la izquierda, y bajo unos árboles, se encontraba
Omar preparándonos la comida. Hoy nos toca arroz con una salsa de verduras,
caballa, y naranjas de postre.
Hacia las 13:30 nos avisan que ya está el microbús que
nos ha de llevar de vuelta a Marrakech, por lo que nos disponemos a cargar todos
nuestros petates y mochilas.
Nos despedimos de los muleros, e iniciamos el viaje de regreso y en una hora llegamos a Marrakech y para alojarnos en el Riad Maud.
Fin de esta preciosa experiencia vivida en el Atlas Marroquí.
Actividad realizada entre el 23/04/2019 y el 28/04/2019 por: Jesús Mingarro, Pau Mingarro, Virgilio Beltran, Juan Samper, Manuel Monleón, Enrique Bodoque, y Paco Tomás.